Sintiendo la suavidad de la arena humedecida y el aire fresco suspirando en mi rostro. Escuchando el ruido de las olas romper en la orilla que se besan con las rocas, y el hablar de las aves que con libertad se deslizan sobre el cálido soplo del viento, las burlonas sonrisas de los niños salpicando el agua y el dulce llanto del bebé cobijado en los amorosos brazos de la madre, que con su insólita ternura lo observa acariciándole su redondeada mejilla.
Mirando el agua que de la mano va con la corriente hacia el Sur, y su brillo cristalino que le determina la luminosidad del día, se muestra resplandeciente para lucir su belleza…
Mirando el agua que de la mano va con la corriente hacia el Sur, y su brillo cristalino que le determina la luminosidad del día, se muestra resplandeciente para lucir su belleza…
La psiquis sonríe
junto a los ojos que retozan gozos de placer.
Vivir cambia su semblante,
y comienza a seducirme en deseos de respirar
de ese mismo aire encantador.
Y me sujeto de aquel cautivante espectáculo
Sin contenerme de presenciar mis ojos sobre el…
Quiero plasmarlo en mi memoria
Y recordarlo como obra del mismo amor
Que transforma la vista de mis ojos
Coloreándolos de un nuevo color.