11/27/2013

Monocromático

Se siente el abatimiento ante todo lo cotidiano. Mis garras hierven en la sed de desgarrar aquello que se acerca demasiado. Sangre caliente que circula dulcemente por mi cuerpo, pero aquel halo del húmedo viento que despeina mi cabello calma el hambre de quitar esto de acá dentro. Las horas se pudren, y yo me pudro con ellas cada vez que aquí tendida me quedo sólo escuchando y observando sin pronunciar palabra alguna. Últimamente socorría a un cigarrillo para liberar algo que pedía salir de mi interior sin saber exactamente qué es, sin embargo, ahora sé que el tiempo es quien me fuma a la misma vez. Sólo me encuentro con el coqueto deseo de un nuevo color para crear una nueva pintura. Una nueva pintura que fascine y conquiste mis sentidos y entonces comprender qué hay más allá de este panorama monocromático.

11/10/2013

Se fuma en sí



Comienza a apagarse la luz poco a poco a medida que el tren se aleja por su línea sin rumbo
Horas que se han ido con el tic tac en mano
Se desvanecen como el humo del cigarrillo que me acompañó durante semanas enteras
Comienzan las despedidas indiferentes, que suceden porque es así como debe ser
Porque sencillamente se ha extinguido el momento cúlmine de aquella historia del ayer
En blanco las hojas junto a un lápiz sin tinta que no tuvo la fuerza de escribir ni el más mínimo trazo Como lo es un punto final
Sin embargo ahora vuelven las letras a mi cabeza
Pidiendo ser oídas por fin y liberarse de aquellas cadenas llamadas silencio.
He de presionar el botón "escape", para nada más dejar ir...

10/25/2013

Ante el aroma de octubre

Sin importar en donde esté,
Un fragmento de mí está esperando un encuentro, siempre
Sencillamente que aparezca,
Que todo sea como en algún momento lo fue;

Que venga a encontrarme en un abrazo,
Con una mirada o sonrisa de aquellas
Me gusta pensar que la espero
Y que ella está por llegar

Que si no sucede hoy, lo será mañana,
Pero sé(siento)que habrá un vez próxima,
Confío en eso
De lo contrario, tal vez muera en la espera

O la espera muera en mí 
Ahora, sin embargo, continuaré aquí
Vivo mejor con esa fe
Ojalá ella estuviera caminando hasta el encuentro

Así como yo espero que llegue
Mucho de lo que veo, trae consigo su imagen
Y me devuelvo a ella
O quizás, en ello yo la busco, hasta por fin verla.

9/08/2013

Todo acaba

Es así. Todo vence. Todo termina y ya. Tarde o temprano, queramos o no. Si no fue hoy, puede ser mañana mismo, dentro de seis minutos, cinco meses o 18 años. Pero es así. Una realidad absoluta e inevitable. Y aún con esto, uno tiende a aferrarse tanto a una historia, a un objeto, a un momento, sentimiento, circunstancias, que ya pasaron, que ya no están, pero que agonizan en la memoria de nuestro apego. Por ahí bien dicen, no hay peor ciego que el que no quiere ver, dicho esto va directamente a la vena, porque comienzan a punzarte recuerdos, momentos pasados y quién sabe, si hasta tu presente dicta ceguedad. Creo que el apego a lo que queremos ver es lo que termina por aniquilar, no hay culpa afuera, no hay culpa en aquella persona, ni en aquellos recuerdos, ni en aquellos lugares, ni en aquellos momentos que se han ido, porque es así, ya se han ido, el tiempo y la indiferencia de un nuevo presente se los ha fumado Sin embargo, lo que queda son nuestras palmas cubriendo nuestros ojos, luego tapando nuestros oídos y los dientes mordiendo nuestra lengua. Y aquello cava tan profundo, y tal vez nos sentimos tan bien allí, ciegos, sordos y mudos, que pasamos días, meses quizás hasta años aferrados a ello, como en el abrazo de un niño a su madre al despedirse para ir a la escuela, sin estar muy convencido de soltarse alguna vez, porque teme enfrentarse frente a algo desconocido, más así yace en tranquilidad y bienestar entre los cálidos brazos de su madre. Es así. Quizás en este preciso instante estés hurgueteando en las más extraviadas memorias para encontrarle un sentido a esto que va escribiéndose en tu mente a medida que lo lees. Quizás seas tú quien está abrazando a su madre sin querer soltarla por miedo a eso que está a tus espaldas y que para ti significa lo desconocido. Quizás seas tú quien ha dormido años con la almohada sobre la cara por desistirse a despertar y ver la luz del día. Quizás has caminado tanto tiempo creyendo que vas en línea recta, ignorando que vas en círculo, y es así como el tic tac del reloj va debilitándose, sabes que todo termina e incluso la pila que mantiene funcionando aquel reloj que, al mirarte al espejo, te hace recordar que el ayer ya es tarde, y no hay nada más que hoy y el mañana sólo existe si tienes suerte. Si bien es cierto por estos días he visto un poco más allá de mi actuar, de mis pensamientos, emociones, deseos y creo que he comprendido un poco más que apegos hay en todas partes. El temer a la pérdida, porque sencillamente no volverás a ver a esa persona que te hará ver lo mejor de ti, el temer a atreverse porque es más fácil y económico la zona de confort y así un sin fin de ejemplares que muestran la idiotez del actuar de uno. Y es así como le damos la espalda a una realidad que está en frente de nuestros ojos, una realidad que puede ser útil siempre y cuando uno lo quiera, para aprender de sí mismos, una realidad que abre puertas hacia otros lugares por los que tal vez no transitaremos dos veces y que se debe disfrutar el viaje a como de lugar, es la única manera de vivir un instante que se reescribe en su máxima particularidad porque cada momento es único. Independiente que la situación sea la misma, las personas, el paisaje, la música, las palabras, ya el sentir no va a ser el mismo, la mente está en constante e incesante movimiento lo que continúa abrir ventanas o cavar más a fondo, de cualquier manera, uno ya no es quien fue ayer ni mañana será el de hoy. Un apego es un mecanismo de ceguera de todos nuestros sentidos, utilizado para yacer en aquella zona de confort y así mas no ver que sólo es ilusión, que sólo es una cadena protectora hacia algo que jamás nos atacará porque no hay nada allí. Sólo es tu mente. Sólo es el idiota hábito de no soltar, por ser reacios al cambio, por encadenarnos a sí mismos a lo que queremos ver sin hacer el más mínimo esfuerzo por tantear la realidad y entonces verla como tal. Pero debajo de estar conciente de toda esta maldita mugre, sé muy bien que aunque a veces lo olvido, todo acabará, todo vence, nada es para siempre, ni este lápiz, ni estas palabras, ni la canción melacólica que escucho en este rato, ni este preciso segundo que ya terminó. Más vale vivir, disfrutar del aprender, enfrentarse, conocer, llorar, reír, abrazar, decir un adiós al oído, mirar desde lejos, pero estar cuerpo y alma en ese instante y hacer todo lo que se siente y no dejar nada preso allí dentro. No pensar más de la cuenta al actuar, muchas veces eso implica que la mente te traicione y seas tu propio enemigo, vivas temeroso y encerrado en ti. Vivas en tu cuatro paredes llamadas temor. Esa es la clave, el apego es consecuencia del temor, por temor no aceptas, por temor no quieres ver, por temor no quieres hablar, ni oír, ni sentir y te aferras a una ilusión, a una zona de confort ignorando tanto mas que está del otro lado. Enfrenta. Observa con atención, escúchate, actúa, habla, calla, siente y aprende de todo aquello, y por sobre todo, siempre tener presente que todo acaba.

8/21/2013

Gris

Mente con una densa y gris nebulosa. Nudo en la garganta oídos un tanto sordos y mirada cansada, labios dormidos y temblorosos. No sé cómo titular esto que siento. Hay mil y un sensaciones que como un fantasma vigilante me asecha todo el tiempo. Sé que hay cosas por aclarar, hay cosas por tantear y saborear, e incluso hasta tragar. Cosas que deben irse hacia donde pertenecen (al pasado) una vez que yo deje de chocar con la misma pared al intentar ponerlas en el presente. Otras que se deben saborear por muy amargas que puedan ser y tragarse una vez que se haya aceptado que no todo puede ser tan dulce como uno quisiera. Gracias a lo que hoy tengo. Si no fuera por ello sería imposible ver más de mí misma. Ver que suelo encerrarme en mi burbuja por respeto a la realidad que hay allí abajo. También ver que mis fantasmas del miedo gritan por dentro vueltos locos cuando mi ilusión de posesión se ve amenazada por el abandono. Muchas cosas por aceptar, por ver, por creer, por aprender, por conocer, y tanto más. Y por mucha mierda que puedan parecerme ciertas cosas que veo en mí, termino viendo, al final del túnel de un profundo pensamiento que, todo aquello es una pieza del rompe cabezas que me forma. A qué voy, voy a que cada parte es esencial ya que todo es parte un todo, nada está porque sí y, sólo mientras se quiera, se puede cambiar. Fácil o difícil no es certeza dada por un estudio científico ni de algún consejo de un buda. Sencillamente depende de cada quién. Creo que mi nulidad psico-emocional debe continuar su curso. Podría ser que permitir que el sentir fluya en uno hasta que por naturalidad se retraiga es una oportunidad de conocerse aún más y sanar naturalmente. El sentir es proceso que está en constante transformación, que si bien es cierto, como todo proceso, requiere de tiempo. Por otra parte podría controlar mi mente, ordenarla, desviar pensamientos, quitar la atención, todo esto a voluntad. Pero qué tal si nada más sea un mecanismo calmante temporal que no me aseguraría que futuramente vuelva a brotar. No lo sé. Además siento que no cuento con la suficiente fuerza para actuar así. Las ganas se desmayan a medida que descienden por mi cuerpo. Pero todo pasa. Esto pasará. La vida pasará. Este instante pasará. Ya pasó. Y continuará el siguiente. (suspiro)...aquí vamos.

8/04/2013

Hasta la siguiente parada

Lánguidas ganas de continuar recorriendo un caudal lleno de espinas, agotados mis ojos revestidos con la espesa y abrupta luz que ya poco ilumina.
Poco sentido tiene el seguir descubriendo las formas al tacto y con los ojos cubiertos, son formas que tiñen aquel túnel más bien escuálido.
Gastadas las suelas, los pasos, que turban el tiempo y la distancia. Aquello desvanece.
El reloj se detuvo, sigue oscilando agonizante aquella manecilla del minutero, sin continuar, sin retroceder.
Tal vez esperando morir, tal vez morir sea imprescindible para que aflore la proximidad de un nuevo camino a seguir.
El frío ha arruinado las hojas del otoño que un día adornaron coloridos los árboles, y en ellas destilaba la lluvia por aquellas tardes desde marzo.
Es así la danza de la naturaleza, el constante cambio, la constante transformación, el movimiento incesante…de lo contrario, todo se estanca, se detiene el curso, y así no hay manera de crecer.
Ahora ha de llegar la siguiente parada, no sin antes haberse concluido este actual capítulo, y así continuar uno nuevo en la hoja en blanco a la vuelta de la página, siendo esta la esencia misma del transcurso de la vida.
No he de conocer el destino del siguiente viaje, mucho menos lo que este ha de deparar, más aquí estoy transitando en el camino hasta aquel paradero.

Tal como una hoja temblorosa y a medio desprender, que la agita sin cesar el viento hasta que, sin más apegos al árbol, se echa por fin a volar.

6/29/2013

A ella



Más el tiempo pasa, los autos andan, las luces se encienden y se apagan, la gente camina incesante, y es así todo el tiempo.
Más cuando estás al contorno de mí, cuando tu voz aun estando quieta, resuena dentro de mí, me adentro a un mundo de sentires que acarician como pluma en mi espalda.
Insólitos colores que tiñen las veredas que dirigen nuestros pasos hacia el encuentro.
Suavidades y texturas diversas que me tocan cada vez que tus poros rozan los míos con el sabor a tu piel de mujer.
Si hasta tus miradas son caricias, más tu sonrisas que me abrazan en calor dulce.
Más tus ojos, oscuros pero tan transparentes que al mirarlos creo ver lo más blando de ti.
Y ni hablar de tus labios, almohadas, almohadas sabrosas. Almohadas porque podría tener mis mejores sueños descansando en proximidad de ellos.  Frescas y carnosas como frutas silvestres, hablan aun cuando ni palabra pronuncias. Y mi piel los llama, mis mejillas, mi cuello, mis labios, mi frente, mis dedos…Mi piel llama a tus labios, mi piel siempre espera su encuentro…Y seca está cuando las horas la distancian de la humedad de tu boca,
 lánguidos mis brazos cuando no reposan en tus hombros.
Tu distancia, es frío que hiere.
Tu cercanía, es calor que abriga.
Si volar quieres, te ayudo a extender tus alas despidiéndote en la ventana…
Si quedarte quieres, te abro la puerta saludándote en la entrada…

3/15/2013

Esto no tiene título

Según facebook hace 1hr atrás me dijiste un hola, al cual yo respondí con otro hola casi una hora después. Estaba viendo una película que hace rato quería ver, por problemas técnicos de las páginas para ver películas on line, no pude antes y me enfadé mucho en su momento. Hoy quería ver una película, y me acordé de esa. Trabaja aquella actriz que no sé cuántas piscolas te tomai antes de encontrarme parecida a ella, la Anne Hathaway, por cierto tiene una mirada y una sonrisa hermosa.
Resulta que no sé. No entiendo, esa es la verdad.
No entiendo por qué quiero que estés aquí, precisamente al lado mío, yo mirándote y escuchando lo mucho que hablas aunque me enferme, y que calles cuando notes que estás hablando demasiado y yo no estoy atenta a lo que dices y me quedes mirando.
No entiendo por qué quiero verte casi en todas partes, te pongo imaginariamente en cada situación, lugar o momento imaginando cómo reaccionarías o cómo sería si simplemente estuvieras allí en donde imaginariamente te veo.
Miro un poco hacia atrás, y todavía recuerdo las veces en que creí que no quedaría contacto alguno, cuando pensé que no hablaríamos más, que ya había acabado cualquier tipo de relación social. Y no po, nada de eso ocurrió :)
Sabes lo otro? (ojalá entiendas mi hablamiento escrito porque ni siquiera en mi cabeza tengo ordenado lo que diré para darme a entender claramente), me pasa que estás tan lejos de mí, veo difícil el momento en el que nos volvamos a encontrar, a veces lo veo tan difícil que pienso que la solución sería olvidarte ahora mismo (aunque no sabría cómo), pero si me pregunto si es lo que quiero, respondo con un no tamaño gigante como yo.
A veces tengo momentos de reflexión y pucha no sé, temo tratarte "amorosamente" porque pienso que con eso puedo aumentar el tamaño a todo esto, siendo que finalmente sigo con la incertidumbre de volver a verte y no sé qué sentido pueda tener o con qué fin. Entendería si en estos momentos estés pensando lo tremendamente indecifrable que soy.
Quería expulsar todo esto de mí...y no podría hacerlo mediante una canción. Quizá no exista una canción que sea tan enredada.
Y la forma de tus labios es atractiva para mí :).

2/14/2013

Chica

En la bajeza del pie de un cerro, 

 caen las lágrimas del cielo hasta tus mejillas,

 se posan como mariposas en las flores durante la época de primavera.

 Hay caudales que reposan en tus curvas y decaen en la hermosura de tu blancura.

 Tierno paladar que saborea el dulce manjar de la fruta, 

 jugo que se regocija en los bordes de tus labios grosos. 

 Tibia tela que teje el manto de tu cabello danzante por las corrientes sureñas del viento.

 El sol que encandila tus ojos canela refleja la cálida luz de tu alma,

 Allí reposaría mis tardes, 

 Allí bajo tus pestañas humeantes echando viento sobre mi cara.

Mundos paralelos

Y nuevamente cae el telón sobre mis hombros, con el peso de una montaña y con la intensidad de una tormenta. Así ocurre cuando mi mundo de fantasías se mira frente a frente con la realidad, cuyo mundo tiene por esencia mostrar lo que es y no lo que parece, nada de lo cual coincide ni en lo más mínimo con el colorido mundo en la cabida de mi mente. No sé muy bien si me frustro al momento de pensar que esta vez no será la última, si no será una de las tantos enfrentamientos más aún por suceder. No sé cómo despertar, me pregunto si habrá un botón cuya función sea detener mis idealizaciones e irrumpir el paso a las fantasías que conforman mi idealismo. ¿Cuántas veces aún debo caer?, ¿cuánto peso más aún me queda por cargar?, ¿cuántas piedras obstaculizarán mi paso haciéndome tropezar?, más bien, ¿cuándo podré al fin caminar al mismo ritmo que tú y mirar a un costado sin voltearme y quedarme con la vista perdida atrás?